La Fiesta del Chivo

“Todas las dictaduras, de derechas y de izquierdas, practican la censura y usan el chantaje, la intimidación o el soborno para controlar el flujo de información. Se puede medir la salud democrática de un país evaluando la diversidad de opiniones, la libertad de expresión y el espíritu crítico de sus diversos medios de comunicación.”
Mario Vargas Llosa

LIBRO LA FIESTA DEL CHIVO

Novela de Mario Vargas Llosa (2000) que relata el fin de una era, la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961) en República Dominicana. Novela considerada histórica o ficción política, que aborda tanto, hechos históricos reconocidos, como ficticios e incluye personajes reales y ficticios.

Está planteada en tres niveles: el primero, es la narración de un personaje ficticio Urania Cabral que después de 35 años regresa a República Dominicana, después de haber estudiado y construido una vida en Estados Unidos, para ver el declive de su padre, Agustín Cabral conocido como “cerebrito”, político y colaborador del dictador Trujillo. Urania sale de su país odiando a su padre y llevándose un secreto que le arruinó la vida y cambió completamente la relación amorosa de padre e hija, a una de odio y resentimiento.

El segundo nivel, reconstruye la larga espera del grupo que había decidido matar al dictador: Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Salvador Estrella Sadhalá, Antonio Imbert, Huáscar Tejeda, Pedro Livio Cedeño y Roberto Pastoriza, todos extrujillistas, pero que se habían cansado de servir a un dictador, que en ese momento tenía como su títere a Joaquín Balaguer quien fungía como Presidente de la República, y consideraban que matar a Trujillo era la única salida para un país que sufría un estado de miedo y corrupción en todos los niveles.

El tercer plano narrativo tiene que ver con el mismo Rafael Leónidas Trujillo con respecto a sus acciones y pensamientos y la relación que tiene con sus colaboradores más cercanos: Agustín Cabral, presidente del senado, Johnny Abbes García jefe del temido Servicio de Inteligencia Militar (SIM), Henry Chirinos senador, Joaquín Balaguer el presidente fantoche y José René Román Fernández ministro de las Fuerzas Armadas, entre otros.

La combinación de ficción, política y memoria colectiva hacen de La fiesta del chivo una obra muy atractiva por la técnica narrativa de estos acontecimientos que en palabras del autor son “tan increíbles que superan cualquier ficción”.

PELICULA LA FIESTA DEL CHIVO

La novela fue adaptada para el cine en 2005 y la película estrenada en 2006. El guion fue escrito por Luis Llosa (primo del autor), Augusto Cabada y Zachary Sklar, dirigida por el mismo Luis Llosa, con una coproducción entre España, República Dominicana y Reino Unido y fue filmada en inglés.

Contó con las actuaciones de Isabella Rossellini, Tomás Milián, Juan Diego Botto y Paul Freeman.

La historia inicia con el regreso a Santo Domingo (República Dominicana) de Urania Cabral en 1992. Visita a su padre Agustín Cabral, alias Cerebrito, quién se ha convertido en un viejo prácticamente inmóvil, mudo y decrépito, pero que durante sus buenos tiempos fue Presidente del Senado durante la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo. Antes de la salida de Urania de su país, su padre había caído en desgracia y sólo pensaba en cómo recuperar la confianza de su jefe. Treinta y cinco años después Urania recuerda todo lo sucedido durante su adolescencia, cuando tuvo que salir urgentemente de República Dominicana y dejó de tener cualquier tipo de contacto con su padre y el resto de su familia. Pero a su regreso visita a su tía, primas y sobrinas y les cuenta el secreto que arruinó su vida para siempre y la obligó a alejarse de su familia.

DEL DICTADOR, RAFAEL LEONIDAS TRUJILLO MOLINA

Nació en San Cristóbal, República Dominicana en 1891. Militar y político que inició su carrera en la Guardia Nacional, cuerpo militar creado por Estados Unidos para cuidar sus intereses en el país. En 1930 ocurre un golpe de estado que derroca al presidente Horacio Vásquez quien termina en el exilio. Rafael Estrella ocupa la presidencia interina y ese mismo año se tienen lugar las elecciones presidenciales y Rafael Leónidas Trujillo ocupa la presidencia que sólo deja por algunos periodos en los que ocupan la presidencia, políticos títeres, como su hermano Héctor Bienvenido y Joaquín Balaguer (quien era presidente cuando Trujillo fue asesinado), ejerciendo siempre el poder real desde 1930 hasta 1961.

La dictadura trujillista fue una época de represiones brutales, torturas y asesinatos, nepotismo y una profunda corrupción. Trujillo ha sido señalado como responsable de la muerte de más de 50,000 personas, especialmente durante la llamada Masacre del Perejil en la que tropas dominicanas mataron a miles de haitianos que vivían en la frontera dominicana con Haití. Con un gran delirio de grandeza, cambió el nombre de la capital del país de Santo Domingo por Ciudad Trujillo, nombró a la montaña más alta del país como Pico Trujillo, coleccionó medallas y títulos, expropió propiedades y negocios para sí mismo y para toda su familia. Además, se hizo llamar constitucionalmente Generalísimo, Benefactor de la Patria, Padre de la Patria Nueva y Generalísimo Doctor, pero calladamente también era conocido como: Chapita por su gusto por las medallas y el Chivo por su interés desmedido por las mujeres. Las tres principales características de la dictadura trujillista fueron: un desmedido anticomunismo, una brutal represión a cualquier tipo de oposición y un enorme culto a la personalidad.

Inicialmente Estados Unidos aprobaba las medidas de Trujillo en su gobierno, sin embargo, a lo largo de la dictadura, este país empezó a criticar y rechazar las políticas tomadas por el gobierno trujillista. En 1960 ante el intento de asesinato del presidente de Venezuela Rómulo Betancourt, quien abiertamente se había declarado en contra de las acciones de Trujillo, Estados Unidos cierra su embajada y retira a su embajador del país. A partir de ese momento, los planes de derrocar a Trujillo contaron con el apoyo y beneplácito norteamericanos. Un año después un grupo conformado por: Modesto Díaz, Salvador Estrella Sadhala, Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Manuel Cáceres, Juan Tomás Díaz, Roberto Pastoriza, Luis Amiama Tió, Antonio Imbert Barrera, Pedro Livio Cedeño, Huáscar Tejeda, todos extrujillistas que se habían cansado de sus acciones o tenían cuentas a saldar con el dictador, planearon su ejecución. Además, estaban involucrados dos importantes personajes: José Román Fernández secretario de las Fuerzas Armadas del país y el mismo presidente títere del momento Joaquín Balaguer.

Siete de los conspiradores se dividieron en tres carros, que esperaban el paso del auto de Trujillo, por la carretera de Ciudad Trujillo (Santo Domingo) a San Cristóbal. Después de muchas horas de espera, vieron pasar el auto y en seguida inició la balacera en la que Rafael Leónidas Trujillo fue muerto y su chofer Zacarías de la Cruz resultó herido pero asombrosamente sobrevivió.

El plan era llevar el cadáver del dictador a Román Fernández, sin embargo, este no cumplió lo acordado y los involucrados fueron buscados y asesinados instantáneamente la mayoría, otros apresados y torturados, entre ellos el mismo secretario de las Fuerzas Armadas (Román Fernández), por órdenes de Ramfis Trujillo, hijo mayor del dictador quien había regresado de Europa para vengar la muerte de su padre.

De 14 involucrados, sólo dos personas sobrevivieron a la terrible represión: Luis Amiama Tió y Antonio Imbert Barrera, quien fue escondido, seis meses, por un amigo, el cónsul honorario de Italia, Francisco Rainieri. Tiempo después fueron declarados “héroes nacionales” e incluso Imbert fue brevemente presidente de facto de la República en 1965. En mayo de 2016 a los 95 años y 55 después de la emboscada y muerte de Trujillo, Antonio Imbert murió víctima de una neumonía, siendo el último sobreviviente de este terrible periodo de la República Dominicana.